Vuela la mañana
canta un mediodía
sombran las sombras al calor del verano
flota en el aire la esperanza de la dicha
que dicha, y dicha y re-dicha
dilata su esencia,
su presencia suspira nuestra nuca al despertar-nos
florece en el patio, en los canteros y en las plazas.
¿y nosotros?
mirando las viejas con mediatardes,
leyendo los diarios medio real, medio ironía.
des-dicha
visto todo esto
solo nos empeñamos
tercos / ciegos / lejanos
en ver
des-dicha.
Mar del Plata, 20 de enero de 2009
No hay comentarios:
Publicar un comentario